jueves, 15 de agosto de 2019


                                                                  EL VOTO CASTIGO

Muchos se han preguntado cómo un pueblo tan culto y preparado como el alemán pudo consagrar en las urnas el ascenso de Hitler al poder.
El voto castigo es un voto irreflexivo, en” contra de” antes que” en favor de”
En el caso de Alemania, la crisis económica y política que arrasó con la República de Weimar luego de la derrota en la Primera Guerra Mundial fue determinante
Entre nosotros, sus orígenes en la pasada elección del 11/8/1  son diversos: caída en la pobreza e indigencia en los más necesitados, un aumento en la presión tributaria y en las tarifas para los sectores medios y la pequeña y mediana empresa u otras razones que sería largo enumerar más allá de la devaluación cuantiosa de la moneda nacional o la desocupación.
A partir de su triunfo en las PASO los voceros de Alberto Fernandez han puesto el foco casi exclusivamente en él difundiendo la idea del regreso de un estadista dispuesto a no ahorrar esfuerzos para lograr la reconciliación de los argentinos y la unión nacional.
¿ Nos toman por estúpidos?  Es obvio que detrás de Fernández  ( o mejor dicho por encima de Fernández) están Cristina, que en cualquier democracia seria no podría siquiera postularse, Máximo y La Cámpora, el exjuez Zaffaroni y los intelectuales del Instituto Patria que han expuesto su intención de implantar un modelo totalitario. Ellos y no aquel serían quienes se adueñen del poder.
El desplome del mercado de acciones y bonos y la suba del dólar son indicadores claros de la desconfianza que inspira el retorno de tantos protagonistas de un pasado ominoso.
Nadie se engaña aunque el lobo se cubra con piel de cordero.

miércoles, 7 de agosto de 2019


                                                       LA CAMPAÑA  ELECTORAL
La campaña electoral para las elecciones de 2019  debió haber comenzado el 11 de diciembre de 2015. Ya en ese momento Cambiemos  hubiera tenido que explicitar sin ocultamiento ni disimulos la gravedad extrema de la situación en que se encontraba el país. Y repetirlo toda vez que aparecieran en su camino críticas u objeciones  a su gestión, porque de no hacerlo, como en verdad ha ocurrido,  estas caerían sobre quienes solamente habían heredado la catástrofe y no sobre sus verdaderos responsables.
Por ello, el discurso de los Fernández y sus adláteres es un claro sofisma, en el estricto sentido del término, esto es,  algo falso que parece verdadero.
Es verdad que los índices de pobreza son pavorosos, que el crecimiento es negativo o que los cierres de fábricas o empresas aumentan día a día.
Pero es falso que sean simplemente consecuencia de una mala gestión de gobierno en los últimos cuatro años. Su origen está en la  década  previa  detrás de las mentiras del INDEC, el cepo cambiario o las declaraciones irresponsables  de los funcionarios de aquellos gobiernos y sólo Dios sabe cómo se encontraría el país de haberse impuesto el candidato de Cristina.
Tal parece que ahora, quienes iniciaron el incendio con su incompetencia y falta de escrúpulos , se presentan vestidos de bomberos para prometer apagar lo que ellos mismos provocaron.



domingo, 4 de agosto de 2019


                                                                    CERRAR FILAS
Durante doce años, desde 2003 hasta 2015, un sector político devenido en organización  para delinquir llevó a cabo un saqueo nunca visto antes. Un ingreso excepcional en divisas provenientes de las exportaciones se esfumó entre el despilfarro y los negocios turbios.
Basta una rápida visión sobre los innumerables procesos judiciales abiertos y aún en trámite en manos de una justicia lenta e irresoluta para siquiera valorar la magnitud del saqueo.
Donde se investigue salta el pus de la corrupción: servicios diversos, alquiler de hoteles, contratación de obra pública, pagos irregulares por parte de particulares al estado, compra de insumos tan inocentes como cunas infantiles, licitaciones arregladas de antemano, material ferroviario obsoleto y un entramado de ílicitos en connivencia con el gobierno venezolano por no hablar de un sinnúmero de irregularidades que se resumen en el obsceno espectáculo de desaprensivos y despreocupados sujetos contando fajos y fajos de dólares ante las cámaras.
Todo lo anterior se ha hecho público por todos los medios infinidad de veces.
Ya el daño es irreparable y sus secuelas traducidas en pobreza y atraso persistirán por años.
Pero hay algo todavía peor: de acuerdo con los encuestadores más serios un muy significativo porcentaje del electorado estaría dispuesto a votar la fórmula que implica el regreso a ese pasado oprobioso incluyendo reformas de la justicia y de la Constitución que generarían un camino sin retorno y un populismo mil veces peor porque carecería de la riqueza que dilapidó en su anterior gestión.
El Ateneo Juan Bautista Alberdi, comprometido como nunca en la defensa de la libertad y las instituciones de la República hace así un llamado a todos los ciudadanos de bien para cerrar filas y evitar que el extravío de algunos políticos lleve a la Argentina a una condición de estado fallido que por su pasado histórico no merece.